Sam Altman sale de Open AI
Cambios en la dirección de Open AI, Mercado Libre usa IAs para reducir ofertas falsas y la CDMX busca regular hospedajes en plataformas digitales.
Imagen de portada por TechCrunch.
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En México tenemos el Buen Fin y Mercado Libre anunció que “implementará inteligencia artificial para evitar que caigas en ofertas falsas”. El director del Marketplace, Alejandro Caballero, comentó en Expansión que se desarrolló un sistema para dar certeza de que las promociones que se muestran durante temporadas de mayor consumo sean reales, al revisar el historial de precios y así validar que los descuentos sean de al menos un 5% para poder formar parte de la campaña, así como que no se haya inflado artificialmente el precio antes de las promociones.
En la Ciudad de México el gobierno local anunció una propuesta para regular los hospedajes anunciados en plataformas digitales como Airbnb, en donde se busca un padrón con registro de los inmuebles, pago de nuevos impuestos por uso de estos y limitaciones en donde los dueños solo pueden disponer de un máximo de tres inmuebles en renta en plataformas, así como que tendrán que informar a los vecinos sobre el uso turístico del lugar. Regulaciones similares se han presentado en ciudades como Nueva York, Berlín o Barcelona.
En Holanda, el gobierno local busca prohibir el uso de Inteligencias Artificiales en Chatbots como ChatGPT o generadores de imagen como Dall-E o Midjourney debido a que los riesgos relacionados a la privacidad y a la violaciones al derecho de autor son muy altos. La Autoridad de Protección de Datos de Holanda concluyó que “las aplicaciones generativas con IA no han demostrado de manera general el cumplir con las leyes del país”.
Si Musk esperaba que los ingresos por anunciantes ayudarían a que X se volviera una compañía redituable, esto parece cada vez más difícil. Después de que en un post Musk apoyara teorías de conspiración antisemitas que favorecen a supremacistas blancos, varios anunciantes decidieron dejar de destinar presupuestos de publicidad para la plataforma, incluyendo a Disney, Paramount, NBCUniversal, Warner Bros. Discovery, entre otros. Este viernes, la CEO de X, Linda Yaccarino, dijo que “X ha sido extremadamente clara con respecto a sus esfuerzos para combatir la discriminación y el antisemitismo. “
Este viernes la mesa directiva de OpenAI anunció la salida de Sam Altman como CEO de la compañía, tomando su lugar Mira Murati, la jefa directiva de tecnología, quien fungirá como la nueva CEO de manera interina. La salida de Altman se dio debido a que “no era consistentemente sincero” al comunicar sus intenciones con la mesa directiva, la cual ya no confiaba en la capacidad de Sam para seguir dirigiendo la empresa. En respuesta Altman publicó en X sobre lo mucho que apreció su tiempo en la compañía.
¿Por qué sale Sam Altman de OpenAI?
Una de las empresas que llegaron para cambiar manejos fundamentales en los que entendemos el internet y el manejo de las inteligencias artificiales en el día a día cambia su CEO. Esto no es del todo raro, excepto si consideramos que la manera en que se hizo fue poco elegante.
La salida de Altman deja muchas dudas. Aparentemente era una de las nuevas figuras claves, quien había logrado acuerdos billonarios con el CEO de Microsoft, Satya Nadella, para así poder expandir el reino de herramientas como ChatGPT, la cual que junto a DALL-E, mostraron usos más tangibles para usuarios normales que las promesas de las criptomonedas y los NFTs.
¿Cuáles pudieron ser las razones de su salida? Eso todavía está por esclarecerse, pero hay algunos indicadores que podríamos rastrear.
De acuerdo con Semafor, Altman estaba buscando financiamiento para una nueva empresa enfocada en desarrollos tecnológicos, y justo en medio de estos esfuerzos es que fue despedido de OpenAI. El comunicado lanzado por OpenAI hablaba de una falta de confianza por parte del consejo directivo, usando eufemismos para indicar que Sam les mentía u ocultaba información, tal vez la teoría más inocente sería que los esfuerzos de Sam no estaban enfocados en una sola empresa, y al esparcir tanto su atención, no podría enfocarse en lo que debería ser su empresa principal.
La salida de Altman no es la única. Este año también abandonaron al compañía otras figuras como Will Hurd, el también ejecutivo de Neuralink Shivon Zilis, y el cofundadore de LinkedIn, Reid Hoffman. Quien coincide con la salida de Sam es Greg Brockman, quien fue miembro cofundador de OpenAI y dejará de ser el jefe de la mesa directiva, pero seguirá siendo el presidente de la compañía.
En otras teorías relacionadas a la poca transparencia, pudieron a ver acuerdos financieros que no agradaron al resto de los miembros de la mesa directiva, y cabe destacar que Microsoft no supo del cambio de líderes hasta minutos antes del anuncio. Por otro lado, la dirección de la compañía suena a algo más importante, especialmente considerando que, si no fuera por la inversión hecha por parte de Microsoft, OpenAI no podría continuar operando debido a los gastos que implican la capacidad de procesamiento necesaria por sus productos. Claro, muchos aman la capacidad de generar imágenes o textos, pero la mayoría son usuarios gratuitos, y las cuentas de paga contribuyen tanto al mantenimiento de la infraestructura como las membresías premium de X lo hacen con la plataforma de Elon Musk.
El escenario más probable puede venir de la mano al manejo de información. Varios organismos gubernamentales han insistido en que el uso de datos para el entrenamiento de las plataformas generativas no es el adecuado y se ha hecho sin consentimiento, violando distintas leyes. Altman ha declarado que la compañía no ha cometido violación de derecho de autor, pero la realidad es que han alimentado con bases de datos de textos e imágenes sobre los que no tienen derecho sus modelos de entrenamiento, como ha sido demostrado en varias ocasiones. Es difícil imaginar el brinco de GPT-3 a GPT-4 sin el uso de este tiempo de información. Si eres miembro de la mesa directiva y enfrentas distintas acusaciones que podrían implicar demandas por miles de millones de dólares relacionadas a la violación de derecho de autor masivo, y tu CEO había dicho en varias ocasiones que esto no era importante, su salida te puede servir para demostrar que estás tomando el camino correcto.
Finalmente, OpenAI no queda libre de contradicciones. Una empresa que empezó sin fines de lucro y que ofrecía supuesto libre acceso se ha convertido en lo opuesto. Tal vez el mejor análisis lo ha ofrecido Chris Bakke en Twitter, en donde revela qué es lo que pasa cuando la mesa directiva abre una puerta secreta en la oficina de Sam… solo para revelar que el cuarto de procesamiento de respuestas de ChatGPT contenía a 21,700 personas que respondían de manera manual todas las solicitudes que llegaban al sistema.
Si quieres saber sobre una demanda previa sobre el manejo de datos que hace OpenAI, revisa nuestro episodio 320 en donde encontrarás más información.